lunes, 27 de abril de 2009

Construyen hogar social para 300 niños de Cantaclaro

Este es un proyecto realizado por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, la caja de compensación familiar comfacor y la Alcaldía, este proyecto se creo con el fin de que hubiera un hogar social que acoja a los niños y se les pueda brindar toda la atención que requieran, sobretodo recreación. Aquí se demuestra el interés por sacar a los niños adelante y brindarles el apoyo que ellos requieran, también se puede ver que se les esta haciendo valer sus derechos.
Aunque un viejo refrán advierte que “del dicho al hecho hay mucho trecho”, al menos 300 familias de Cantaclaro —reconocido como una de las invasiones más grandes de Suramérica— están a la expectativa de que se les cumpla el sueño de tener, allí dentro de su barrio, un hogar social que acoja a sus niños y les brinde la atención que ellos requieren, especialmente en el área de recreación.
Se trata del primer centro social en el país construido entre el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), la Caja de Compensación Familiar Comfacor y la Alcaldía, para beneficio del mayor número de niños, hijos de padres de escasos recursos económicos.

El proyecto empezó a avanzar con la compra e inmediata entrega de un lote de 6 mil metros cuadrados, entre el Inurbe en liquidación y la Alcaldía de Montería, donde asistirán durante todo el día los pequeños entre recién nacidos y seis años.

Uno de los propósitos, explicó el alcalde de Montería, León Ojeda, es cualificar el servicio de atención de los niños, para su desarrollo integral.

El Gobierno Municipal recibió el predio, y éste de inmediato lo entregó a la Caja de Compensación Familiar de Córdoba, Comfacor, para que construya el jardín social, con un costo de 2.100 millones de pesos, recursos que aporta el Icbf, mientras que la Caja de Compensación se encargará de los diseños, construcción, dotación y puesta en funcionamiento del sitio.

En el lugar, situado cerca a la salida hacia Planeta Rica, deberá quedar una Ludoteca, que a propósito será la segunda de Montería, habrá un área educativa con nueve aulas, área de sala-cuna, zona de gateadores. También contará con zona administrativa, sala de profesores y enfermería, zona de servicios con cocina, comedor y lavandería, aula múltiple, cancha para deportes y área de juegos infantiles. “Esto nos dice que los 300 niños van a cambiar sus condiciones educativas y afectivas”, precisó el alcalde Ojeda.

El proyecto —si no termina en un elefante blanco, advirtió la comunidad de Cantaclaro— estaría listo a comienzos del próximo año.

Alejandra Montoya, coordinadora de Infraestructura Mobiliaria de la dirección nacional del Icbf, explicó que serán niños del programa de hogares comunitarios tradicionales. “La selección se hará a través de nuestra dirección regional, efectivamente deben pertenecer a las familias clasificadas de niveles uno y dos del Sisbén”, advirtió.

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